En la vida hay situaciones en las que hay que tomar decisiones, es una putada pero es así.
Y a veces incluso consigo acertar con la decisión tomada (tómese como ejemplo la vez que decidí no dedicarme al mundo de la canción, claro que tampoco tenía otra opción) pero en la mayoría meto la pata hasta limites insospechados.
Como la vez que le quite la silla a un cliente en el restaurante d mi tio, no sé porque no volvió mas, la gente no tiene sentido del humor. O la vez que quise saber si era cierto que los gatos caen siempre de pie, es cierto pero nadie hace mención a la altura en la que las patas de los gatos empiezan a correr riesgo de fracturarse, o incluso la vez que viendo el cielo negro de cojones me fui de acampada al punto mas meridional de la península (esta en Portugal, para aquellos que no entienden como siguen sin adesionarse a nosotros) porque pensé que no llovería, eso tuvo su parte positiva porque, cuando corríamos con las ensaladas, el mantel y Anselmo con 39º de fiebre, Riky con todo el tinglado y Ovidio con las llaves del coche perdidas en la mochila, decidí no dedicarme a la meteorología.
El caso es que viendo mis antecedentes, ¿porque cojones la vida se empeña en seguir poniéndome a prueba?
En esta ocasión me veo en la obligación de decidir como tomarme las cosas. Esta es de las mejores, porque la tónica habitual de mi vida no decido que hacer en un periodo superior a 4 días.
Cuando pienso que hacer con mi vida no lo tengo del todo claro, supongo que me he dedicado mucho tiempo a pensar que me pongo por la mañana y ahora que ya tengo la suficiente ropa como para que no me preocupe y mi colección de zapatos hace que sea imposible que no conjunten a las mil maravillas con la vestimenta anteriormente nombrada, me ha dado por pensar.
Esto al final me acarreará dudas existenciales, como la de saber de donde carajo colgaba Heidi el columpio. Por que dios siendo todo poderoso no nos hizo de acero como a Terminaitor y nos hizo de barro (como a los botijos). ¿Por qué en las iglesias ponen pararrayos? ¿No las protege Dios? Un poquito de confianza, ¿no?. O la de saber si Yola Berrocal tuvo cerebro antes de rellenar el hueco de su cavidad craneal de silicona, pero la mas importante es, ¿Y yo donde me veo en unos años?
Supongo que esto viene reflejando que tengo 27 años, que si, seguro que mientras lees esto piensas, jo, yo soy mayor. Pues mira, o te has hecho estas preguntas existencialistas ya o te pillará el tren.
Resulta que mi crisis empezo el día que me invitaron mis amigas a comer a casa de una de las brujillas (anteriormente conocidas como Marus) y me di cuenta que no tenia nada que ver con ellas, me sentí como la protagonista del “diario de Brighets jones”.
No le di gran importancia pero…
Ese día, sin darme cuenta empezo el declive, resulta que mi hermana es una señora casada, Ana ha sido madre, en esa cena (y juro que es real) se habló de donde se compraron las cortinas del baño, y yo???…. Quien piensa en mi???
He decidido hacer una lista con las cosas que, me definirían, con la intención introspectiva de conocerme, sabéis de lo que me he dado cuenta, he encontrado multiples razones para odiarme. Hay cosas de las que no me siento especialmente orgullosa, lo que pasa es que están tan arraigadas en mí, que me cuesta deshacerme de ellas. Hay vicios que no tengo intención de abandonar.
Aunque se me llene la boca (y a muchos de vosotros) diciendo no me arrepiento de nada de lo que hago, no es cierto… Hay cosas que pienso dejar de hacer desde este mismo instante (o al menos voy a intentarlo) porque me arrepiento, me arrepiento muchísimo, infinito…
ME ARREPIENTO
1. De haber seguido Operación Triunfo
2. De haber votado a Ainhoa en la 2ª edición de Operación Triunfo
3. De haber seguido Gran Hermano
4. De haber seguido Gran Hermano VIP
5. De haber seguido Hotel Glamour
6. De simpatizar con Tamara/Ámbar/Yurena
7. De saber imitar a la perfección a Tamara/Ámbar/Yurena
8. De tener y haber tenido pensamientos pecaminosos conKarlos
Arguiñano
9. De tener y haber tenido pensamientos pecaminosos con Álvaro de Luna
10. De tener y haber tenido pensamientos pecaminosos con Jaime Mayor Oreja
11. De tener los domingos trastornos alimentarios y mezclar sin pudor ni compasión: Cheetos pelotazos, Doritos Taco Latino, Ruffles York´eso, helado de fresa, pipas, galletas Oreo, sandwiches, regalices y chocolates.
12. De reírme de los males ajenos
13. De ser la inventora de prácticamente todos los apodos de la gente de mi oficina
14. De poner la oreja en la pared cuando mi vecina tiene visita
15. De mirar por la mirilla cuando mi vecina se despide de sus invitados
16. De gastarme más dinero en trapos de lo que me puedo permitir
17. De tener tanta ropa en mi armario con la etiqueta puesta
18. De saber que nunca me la voy a poner
19. De haberla comprado en ataques de consumismo
20. De tener continuamente ataques de consumismo
21. De ser tan antipática con las peluqueras
22. De ser tan antipática con los taxistas
23. De haber cantado en un Karaoke
24. De haber cantado en un Karaoke por María Jiménez
25. De creerme que lo hacía bien
26. De que me gustara
27. De haberme acostado tantas veces vestida
28. De ni si quiera haberme quitado los zapatos
29. De no acordarme de las caras de ciertas personas
30. De atascar la impresora y huir sin decir nada
31. De atascar la fotocopiadora y huir sin decir nada32. De darme un
golpe contra un coche aparcado y no dejar una nota33. De tener largas conversaciones con mi perro
34. De creer que me contestan
35. De hacer caso de sus consejos
36. De reírme de la gente que sale en “El Diario de Patricia”
37. De haber llorado con “El Diario de Patricia”
38. De presumir de ser la más veloz escupiendo huesos de aceituna
39. De escupir un hueso de aceituna en el ojo abierto de un amigo
40. De provocarle con esto una úlcera en la córnea
41. De tener un CD de Enrique Iglesias y no haberlo tirado
42. De que me guste una canción de Carlos Baute
43. De robar en el difunto “Galerías Preciados” un libro de setas
44. De habérselo regalado a mi padre por Reyes
45. De usar toallitas desmaquilladoras de la marca DIA%
46. De haber vomitado en el felpudo de mi vecino
47. De haber dicho indignada en una reunión de vecinos que no
podíamos consentir actos como ese
48. De ser una “tocapelotas” en los comercios y restaurantes
49. De tener una carpeta llena de hojas de reclamaciones puestas por mí
50. De tener comida caducada en la
51De no tirarla
52. De dar guacamole caducado a mis
53De quedarme dormida en la sala de espera del dentista
54. De que se me cayera la baba
55. De consultar mi horóscopo diariamente
56. De tomarme a pecho lo que dice
57. De que mi mejor amiga se llame “VISA”
58. De haber conseguido ser persona non grata en un pueblo de Madrid
59. De no decir al conductor de un atobús que se ha saltado la parada
porque me daba vergüenza ponerme a dar voces
60. De hacer de las tiendas de los chinos, mi supermercado habitual
Eso es todo y no olviden supervitaminarse y mineralizarse.
Y por cierto el gato se salvó afortunadamente, pero desde aquel día le dio por correr cada vez que me veía, lo cual no dejaba de ser gracioso, ver como un gato con la pata entablillada se daba a la fuga